Huelva es denominada puerta del Atlántico ya que los ríos Tinto y Odiel desembocan en ella. Su estuario siempre fue un lugar privilegiado como puerto de refugio de barcos y para la carga y descarga de mineral de la franja pirítica ibérica. Es por eso que es el enclave territorial con las poblaciones más antiguas de la península ibérica, la cual ha estado ocupada desde los tiempos más remotos.

Los Cabezos son formaciones geológicas similares a las colinas y conforman gran parte de la topografía de la ciudad de Huelva siendo así una de sus señas de identidad por la influencia que han tenido en el desarrollo de la capital. Los Cabezos se crearon en el período terciario por los sedimentos aportados de los estuarios del Tinto y el Odiel y pueden alcanzar hasta 60 metros de altura en algunas zonas. Los restos arqueológicos de los que fueron los primeros pobladores de la ciudad atestiguan que los Cabezos han servido como defensa natural durante millones de años protegiendo al estuario de tsunamis y ataques. El origen de la ciudad se encuentra precisamente en el Cabezo de San Pedro y en el desaparecido Cabezo del Molino de Viento (actual zona del Paseo Santa Fe). Estos monumentos naturales recogen registros de animales de hace quince millones de años, desde pequeñas especies a ballenas prehistóricas entre 10 y 12 metros de longitud. Del mismo modo, varios vestigios y fuentes documentales respaldan su importancia en época romana.

Otro de los papeles importantes que ha tenido este monumento natural, es sin duda la dotación de agua a los onubenses gracias al acueducto romano que se halla en su interior en la zona del Conquero. Este tiene su salida entre otros por la denominada Fuente Vieja.
Podemos encontrar Cabezos en distintas zonas de Huelva:
El Conquero: Conquero, Moret y Mondaca.
La Joya: Joya, el Cabezo del Pino o San Andrés.
San Pedro: San Pedro y el Cementerio Viejo.
La Esperanza: Esperanza, La Horca, Piscinas, San Sebastián o Padre Julián en La Esperanza.
Molino de Viento (ya desaparecido)
Debido a su posición privilegiada, el Cabezo del Conquero es uno de los lugares donde mejor podemos contemplar la ciudad y divisar no sólo las marismas, sino también Punta Umbría, Aljaraque, Corrales y Gibraleón.
Pero cada Cabezo tiene su papel en la historia:
El Cabezo de San Pedro acogió el núcleo urbano histórico desde tiempos tartésicos, sirviendo como defensa natural lo que pudiera haber sido la formación de un castillo. Alrededor de éste está ubicada la ciudad desde el siglo IX a. c
El Cabezo de la Joya fue enclave funerario en la protohistoria siendo así una de las necrópolis más significativas de la península.
El Cabezo del Conquero fue el sistema de captación y abastecimiento de agua para la ciudad gracias al acueducto romano de su interior.
La especial orografía de Los Cabezos dota de belleza a la ciudad y hace que los onubenses disfruten de paseos por sus parques, montes y miradores naturales. Ejemplo de ello es el denominado “pulmón verde” de Huelva, el Parque Moret, de unas 72 hectáreas y que se comunica con el Cabezo del Conquero donde se pueden apreciar unos hermosos atardeceres.
Hasta finales del siglo XIX, los Cabezos eran compatibles con la edificación ya que se hacían alrededor de ellos. En la actualidad, el crecimiento de la ciudad y la construcción de nuevos edificios están siendo los enemigos de los Cabezos, ya que ciertas administraciones los consideran elementos incómodos y los catalogan como “solares”, convirtiéndose así en los grandes olvidados para los planes urbanísticos de Huelva.

Ejemplo de esta marginación es el Cabezo de San Pedro que ha sido ‘recortado’ con la construcción de un edificio de ocho plantas. Otros tantos ya han desaparecido, y el resto puede tener el mismo destino teniendo en cuenta el Plan General de Ordenación Urbana de 1999.

Por este motivo, se han creado plataformas y movimientos ciudadanos en Huelva donde se reivindican la preservación y el respeto a los Cabezos, tales como Huelva te mira a través de manifestaciones y campañas de información, así como Platalea que organiza habitualmente visitas guiadas a la Fuente Vieja.
En ecoHuelva, pensamos que es responsabilidad de todos mirar por la continuidad de estos monumentos naturales. Dada su importancia en la historia y en la fisionomía de la ciudad, deben ser tratados como patrimonio cultural y natural a conservar.
Creemos que hay que garantizar un desarrollo más sostenible y responsable de la historia, el medioambiente, la cultura y en definitiva el respeto a nuestra ciudad y a todos los onubenses.
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